En este sentido las campañas de los candidatos Gustavo Petro y Rodolfo Hernández han replanteado la forma de relacionarse con sus electores y han adoptado los lenguajes propios de cada red social, cambios que les han demandado una mayor inversión en tiempo, energía y en recursos para crear una conexión emocional con las personas que dicen que no les interesa la política tradicional.
El auge de las redes sociales ha ocasionado que el debate electoral se traslade a estos escenarios virtuales, donde se mueve un número significativo de personas, primordialmente los jóvenes. Una publicación en Instagram, un video en Tik Tok o un trino pueden impactar a una mayor cantidad de electores que un mitin en plaza pública o una reunión privada. Por esta razón los actuales candidatos a la presidencia de Colombia cuentan con asesores digitales para diseñar las estrategias que les permitan llegar a grandes audiencias, en particular a aquellas que no son cautivadas por largos discursos en plazas, debates y entrevistas en los medios tradicionales.
En este sentido las campañas de los candidatos Gustavo Petro y Rodolfo Hernández han replanteado la forma de relacionarse con sus electores y han adoptado los lenguajes propios de cada red social, cambios que les han demandado una mayor inversión en tiempo, energía y en recursos para crear una conexión emocional con las personas que dicen que no les interesa la política tradicional.
De otro lado, se calcula que en Colombia hay cerca de 32 millones de cuentas activas en Facebook, 12 millones en Instagram, casi 13 millones en Tik Tok y 3,2 millones en Twitter, lo que representa una gran bolsa de votos que podría definir el rumbo de los resultados electorales a favor de uno u otro candidato.
Petro aventaja a Hernández en números en las redes sociales. En Tik Tok tiene cerca de 1 millón de seguidores, en Instagram más de 1 millón, en Facebook más de 2 millones, mientras que en Twitter suma más de 5 millones. Rodolfo Hernández tiene 588 mil seguidores en Tik Tok, en Instagram 700 mil y en Facebook más de 1.5 millones. Sin embargo, el reto para ambos es convertir el número de seguidores que tienen en votos que les asegure el triunfo en los cómicos electorales.
Es necesario señalar que las publicaciones en las redes van más allá del volanteo digital, también son frecuentes los ataques de las bodegas y de los medios digitales que difunden información falsa y tendenciosa, donde se habla de la vida personal de los candidatos y se minimizan sus propuestas.
Finalmente, hacemos un llamado a las dos campañas y a sus seguidores para que le bajen el tono a los ataques personales y se enfoquen en presentar las propuestas para reducir la brecha social y económica que hace de nuestro país uno de los más desiguales en América Latina.
AUTORES
Rodrigo Tabares Ruiz
Coordinador de Comunicaciones | Pereira