En el campus Cali de la Universidad Cooperativa de Colombia, encontramos a un estudiante extraordinario que encarna la palabra «felicidad». Jesús Josías Isaza, un joven psicólogo en formación, ha dedicado su vida a perseguir, ayudar a los demás, a encontrarla también. En este perfil, exploraremos la vida y la filosofía de Jesús, un individuo elocuente y empático que ha superado desafíos personales y ahora se esfuerza por iluminar la vida de quienes lo rodean.
Jesús Josías Isaza se conoce por su alegría, tranquilidad y resiliencia. Sus amigos y amistades lo describen como una persona perseverante, siempre dispuesta a escuchar y ayudar. Pero, más allá de su personalidad amable, Jesús es un firme defensor de la empatía. Su mantra de vida es claro: «Recuerda ser una persona empática, porque no sabemos las luchas que los demás enfrentan".
La fe juega un papel importante en la vida de Jesús, ya que cree en Dios y en los sueños tanto individuales como colectivos. Además de su espiritualidad, es un crítico abierto de los estándares de belleza que a menudo limitan y etiquetan a las personas. Reconoce la desigualdad de género y se alza en contra de ella, así como la estigmatización de diversas comunidades.
La historia de Jesús es la de un joven soñador que enfrentó desafíos desde una edad temprana. Criado en el campo, tuvo que lidiar con carencias económicas y la diversidad sexual en un entorno de mentalidad cerrada. Sin embargo, desde joven soñaba con un futuro diferente, uno en el que pudiera llevar a su familia hacia adelante. A pesar de enfrentar el bullying debido a su orientación sexual, nunca renunció a sus sueños y mantuvo su luz interior brillando.
A los 18 años, Jesús decidió independizarse y comenzó su camino en la universidad. Se sumergió en sus estudios de psicología con una pasión que irradiaba felicidad. Ahora, está decidido a utilizar su educación para ayudar a las personas a superar situaciones difíciles y encontrar la felicidad, al igual que lo hizo él.
La vida universitaria ha sido una época de gran felicidad para Jesús. Ama su trabajo y sus estudios, y se enorgullece de cómo puede influir de manera positiva en las personas. Su estilo de vida refleja su búsqueda constante de la felicidad: disfruta de la lectura, la música, las conversaciones significativas, el contacto social, el baile y, sobre todo, de la vida que siempre soñó vivir.
Jesús, un hombre gay, se siente feliz con lo que es y, más importante aún, busca fomentar la empatía en los demás. Invita a las personas a evitar comentarios hirientes y a utilizar el poder del aula para construir y enriquecer a los demás, en lugar de destruir.
A la comunidad en general, les insta a ser auténticos y diversos, a luchar por sus sueños y a recordar que su sonrisa puede cambiar el mundo, en lugar de permitir que este cambie su sonrisa. En una humanidad donde la búsqueda de la felicidad a menudo se ve obstaculizada por los desafíos personales y sociales, Jesús Josías Isaza es un hombre cuya historia es un testimonio inspirador de perseverancia, amor propio y compasión.